Desnudarse con los hijos.

En contra de lo que "piensa" Google, que no reconoce el nudismo familiar, nosotros somos grandes defensores del mismo, como ya pusimos de manifiesto en algunos artículos que publicamos anteriormente en el blog, como A la playa en familia o El desnudo en el arte. Esos locos bajitos.

Y no solo somos defensores del nudismo familiar, sino que creemos que enseñar con el ejemplo, como también expresamos en nuestra publicación La nuevas masculinidad... ¿nudista?, es la mejor manera de inculcar valores y, por tanto, considerar la desnudez como un estado natural puede ayudar a nuestros hijos a tener claro cómo es un cuerpo adulto normal y a valorar la imagen corporal de forma saludable.  

Hoy queremos compartir con vosotros un artículo de Psichology Today que nos ha parecido interesante, pues, aunque no es un artículo nudista ni sobre nudismo, habla de la desnudez con una buena orientación y nos ayuda a contextualizar la desnudo durante las distintas etapas del crecimiento de nuestros hijos y en diversas situaciones sociales. 

No obstante a nosotros nos gustaría ir un paso más allá y matizar alguno de los puntos que expone, pues nosotros, como nudistas entendemos que, por ejemplo, no existe y menos en tu propio hogar, ningún lugar inadecuado para estar desnudos.

Es importante asumir que nuestras actitudes hacia la desnudez pueden condicionar conductas y actitudes futuras y en este artículo nos presentan algunos consejos para manejar la desnudez en familia.

Aquí os dejamos el artículo para su lectura y vuestra valoración personal.

Ocho cosas que debe saber sobre la desnudez y su familia

Desnudarse con sus hijos.

Creo que la desnudez debe tratarse como algo natural, pero sin complicaciones. Los padres se sentirán cómodos con diferentes grados de desnudez, según sus propios antecedentes e imagen corporal . Algunas familias se sienten cómodas duchándose o visitando saunas juntas. Otros pueden sentirse más cómodos solo estando desnudos con miembros del mismo sexo . Incluso, otros padres pueden ser reacios a desvestirse frente a un niño, y mucho menos mantener una conversación mientras están desnudos. Pero recuerde que sus actitudes hacia la desnudez moldearán el futuro de su hijo de diversas formas.  

Los niños tienen una curiosidad natural por la desnudez. Estar desnudo alrededor de sus hijos, ya sea ocasional o regularmente, puede enseñarles cómo es un cuerpo adulto "normal". Modelar la comodidad y el respeto por su cuerpo puede convertirse en la base de una imagen corporal saludable a medida que su hijo crece y experimenta los cambios de la adolescencia .     

Estos son algunos consejos para manejar la desnudez en su familia.  

1. Sea explícito sobre el hecho de que existen diferentes reglas culturales en torno a la desnudez. La forma en que se maneja la desnudez varía entre culturas e incluso entre familias. En algunas comunidades del norte de Europa, familias enteras se bañarán juntas desnudas. En Alemania, algunas piscinas públicas permiten a los niños nadar desnudos hasta los 6 años; los adultos pueden desnudarse con frecuencia en playas o parques. En otros lugares, sin embargo, encontramos numerosas restricciones sobre cuándo uno puede desvestirse y frente a quién. Explicar estas diferencias a los niños les ayudará a desarrollar una comprensión del comportamiento apropiado en su propio contexto cultural, así como la capacidad de abstenerse de juzgar cuando se enfrenten a diferentes costumbres o creencias.  

2. Sea explícito acerca de las reglas situacionales cuando entren en juego. Estar desnudo es normal en algunas situaciones e inapropiado en otras, incluso dentro de su propia familia. Cuando los niños son pequeños, no han desarrollado un sentido de modestia basado en prescripciones culturales y no les importa quién los vea desnudos. Sin embargo, eventualmente necesitarán manejar la exhibición de su cuerpo de la manera esperada, y los padres pueden ayudar a los niños a aprender a hacer esto sin inculcarles un sentido de vergüenza.. Durante los primeros años, pueden tener la oportunidad de verte desnudo. Es posible que desee bañarse juntos, ya que de todos modos necesitarán ayuda. Sin embargo, solicite privacidad cuando la desee, como cuando use el baño. Los niños también deben aprender que la desnudez incomodará a las personas en algunas situaciones, como cuando hay visitantes presentes. La desnudez será natural y esperada en algunos lugares, como en el baño o el dormitorio al cambiarse, pero fuera de lugar en la cocina.  

3. Establezca patrones y expectativas desde el principio. La desnudez del sexo opuesto dentro de la familia no es inaceptable o traumatizante si ocurre temprano y dentro de contextos apropiados, por ejemplo. Para los hombres u homosexuales que crían hijas en los EE. UU., Por ejemplo, la desnudez no será sorprendente si se tratara como normal durante los primeros años. Lo mismo ocurre con los hermanos del sexo opuesto (aunque se debe tener cuidado desde muy temprano para enseñar a los hermanos a mantener límites más estrictos cuando sus amigos están presentes en el hogar).   

4. Está bien comparar cuerpos cortésmente y hacer preguntas. Desarrolle una sensación de tranquilidad y comodidad con su propio cuerpo y al responder preguntas. Sus hijos pequeños mirarán su cuerpo, comparándolo con el suyo o con el de su pareja. Pueden hacer preguntas sobre los senos, el pene o el vello púbico, y los padres deben responder de manera objetiva (los senos proporcionan leche a los bebés, el cabello proporciona protección refrescante, porque los cuerpos de los adultos están más calientes, etc.). Este proceso también les enseña a los niños cuándo es aceptable mirar los cuerpos de otras personas y qué tipo de comentarios se pueden hacer.

5. Utilice la desnudez como un momento de enseñanza. Enséñele a su hijo los nombres correctos para cada parte del cuerpo: pene, vagina, vulva, senos, glúteos, etc. Aprender las palabras adecuadas le ayudará a comprender la anatomía y reducirá la confusión. También mantendrá a su hijo más seguro. Si un niño aprende a diferenciar las partes del cuerpo, también podrá diferenciar entre toques apropiados e inapropiados. Un toque accidental en las nalgas durante el juego es muy diferente a alguien que intenta tocar la vulva, pero si toda esta área se conoce como un "culo culo", el niño tendrá dificultades para interpretar y comunicarse sobre el comportamiento de los demás. Con los niños mayores, la desnudez también puede generar conversaciones sobre los cambios que se pueden esperar durante la adolescencia.

6. Mantenga el erotismo fuera de escena. Estar desnudo, incluso con una pareja presente, no significa que esté bien ser sexualmente expresivo. No frote ni toque a su pareja de formas sexualmente explícitas, ya que esto puede confundir a un niño pequeño.

7. Siga el ejemplo del niño. En la adolescencia, la autoconciencia acerca de la desnudez generalmente se desarrolla independientemente de cómo se crió al niño. Es posible que algunos adolescentes quieran acompañar a sus padres a un baño de vapor desnudos o bañarse desnudos con la familia; otros no lo harán, incluso si les pareció bien en el pasado. Respete tales decisiones y use señales para determinar su nivel de comodidad incluso si no se dice nada directamente. Algunos niños pueden sentirse incómodos con su propia desnudez o con la suya también en años anteriores. Honrar los sentimientos de un niño más pequeño se puede hacer de manera sexualmente positiva: por ejemplo, cumpliendo con las solicitudes de bañarse por separado a cierta edad, pero sin ocultar su desnudez en su propio dormitorio o baño.

8. Cultiva actitudes para toda la vida. La comodidad con el propio cuerpo desnudo se traduce en comportamientos saludables más adelante en la vida. La confianza , la autoestima y la imagen corporal están entrelazadas. Su hijo está observando cómo responde a los cambios en su apariencia o salud, cómo maneja el envejecimiento y las formas en que está influenciado por los ideales culturales de belleza, masculinidad o feminidad. Observe si se critica a sí mismo frente a su hijo. Incluso si le falta autoestima, no es necesario que la transmita. Cuando sea apropiado, hable sobre las diferencias entre los cuerpos que ve en las revistas o en la televisión y el cuerpo que tiene. Enmarque comportamientos como hacer dieta en términos de salud en lugar de solo apariencia.

Lea Lis MD

The Shameless Psychiatrist

Fuente: https://www.psychologytoday.com/us/blog/the-shameless-psychiatrist/201905/eight-things-know-about-nudity-and-your-family?fbclid=IwAR0cRL-b5x8sMK1wIzy4xtssceho3QrGZLyT4x-8vuAYtD_FdbYVETPCxUE

Nota: Las fotografías no pertenecen al artículo, proceden de Google y Twitter, si ves alguna tuya y no quieres que esté en nuestro blog, avísanos y la eliminaremos.

Un año mas... y ya cumplimos tres

Llega febrero y nos toca hacer balance, nos toca echar la vista atrás y ver todo el camino que hemos recorrido, el esfuerzo realizado, las piedras que hemos tenido que sortear y los éxitos. De todo hay en el camino, mucho trabajo, charlas y debates para organizarnos y, por supuesto, el ruego a nuestras amigas las musas para que nos iluminen porque las ideas se acaban, y a veces hay que confesar que nos vemos realmente acorralados a la hora de cumplir nuestros objetivos de publicaciones mensuales.

Así y todo hemos llegado a nuestro tercer aniversario que, en estos tiempos que corren, es realmente un éxito dada la efervescencia de las redes sociales, la infinita información que nos podemos encontrar en Internet y lo efímero que son en muchos casos los blogs sobre nudismo, porque es muy difícil mantener una línea y sobre todo que siga siendo atractivo.

Este año ha sido difícil, muy difícil para todos, mucha gente no ha podido disfrutar de sus vacaciones, sus posibilidades de estar desnudos en la naturaleza se han visto reducidas, pero lo peor ha sido la falta de trabajo y el maldito virus que nos ha acosado y sigue haciéndolo sin piedad. Nuestro más afectuoso abrazo a todos y todas quienes hayan pasado por este trance y por supuesto a quienes hayan perdido a seres queridos en estas circunstancias. Queremos dejar aquí nuestro recuerdo para los que se fueron.

En este año hemos tenido más de 120.000 visitas en el blog y hemos sumado muchos seguidores en las distintas redes sociales en las que publicamos nuestros artículos: Instagram, Twitter, Facebook y Telegram. Las cifras son muchas veces apabullantes y nos dan una idea del poder de las redes sociales a la hora de darnos visibilidad.

 

Número total de visitas

Distribución de visitas por países

 

Nos gusta cada año hacer un balance de las publicaciones de autoría propia, las noticias y artículos compartidos llevan también un trabajo de selección y maquetación, pero los reconocimientos corresponden a cada uno de los autores que lo firman.

Siempre estamos agradecidos a los amigos que colaboran en el blog, ya sea con artículos o aportando fotografías de autoría propia para ilustrar los nuestros. De esta manera hemos podido viajar a Costa Natura o a los magníficos paisajes de La Gomera y de  El Hierro y disfrutar de sus rincones. ¡Gracias amigos!

Hemos podido apreciar el desnudo en el arte Sin ropa en el museo y ver esos magníficos Cuerpos de playa o a Esos locos bajitos que tan bien han plasmado muchos artistas.

Curiosamente, en este año también hemos tenido la grata sorpresa de que algunos de nuestros colaboradores hayan sido premiados en un Concurso fotográfico.

No hemos escatimado imaginación y buen humor en artículos como La nueva masculinidad… ¿nudista? o Yo me quedo en casa, en bolas.

Siempre dedicamos algunos artículos para aclarar dudas que puedan tener nuestros seguidores ¿Playas nudistas o de tradición nudista? y para informar respecto a la legalidad o la legislación respecto al nudismo en nuestro país ¿Es delito el nudismo?

 

Sin dejar de lado la actualidad, divulgando: El símbolo naturista, opinando: Por qué pensamos que las federaciones nudistas deberían cambiar y dando a conocer: ¿El fin de las playas nudistas?

Seguimos teniendo ilusión, seguimos haciendo planes y elaborando ideas para así, al menos en febrero del año que viene, podamos decir ¡Aquí seguimos!

Muchas gracias por leernos, por dejar vuestros comentarios, por las ideas que nos hacéis llegar en privado y por supuesto por ser tan fieles seguidores de este blog.

Quique, Eladio y Nakedu 

 

 

Nudistas con ojos textiles

Los nudistas (o al menos muchos nudistas que construimos castillos en el aire), idealizamos la posibilidad de poder estar desnudos en cualquier momento y lugar donde nos guste y realizar cualquier actividad en la que nos sintamos a gusto estando desnudos, es decir, soñamos con tener la posibilidad de vivir en una sociedad donde se respete la plena desnudez.

Con el tiempo que en el pasado invierno estuvimos confinados (y aún seguimos con grandes restricciones) a consecuencia del coronavirus, lo primero que hicimos fue estar desnud@s en casa. Y claro, una vez desnud@s, ¿quién no aprovechó para ordenar los armarios estando desnudo@?. Y ¿quién no pintó esa habitación que lo necesitaba y lo hizo desnud@? ¿Y quién arregló una persiana rota, haciéndolo por supuesto también desnud@? ¿Y quién colgó un cuadro sin tener que vestirse? Y por supuesto imagino que las tareas propias de toda casa, barrer, limpiar el polvo, fregar el suelo, limpiar los baños, tender la ropa e incluso cocinar, todos las habremos hecho estando desnud@s. Y creo que estaremos de acuerdo en que los nudistas veríamos no solo de lo más normal, sino incluso hasta saludable, hacer todo este tipo de actividades estando desnud@s.

Es más, creo que si no todos, a muchos nos gustaría poder realizar desnudos muchas más actividades cotidianas individuales y sociales, nos gustaría salir a la calle desnudos, ir a comprar sin tener que vestirnos, si nuestra profesión nos lo permitiera nos gustaría poder hacerlo desnudos (de hecho se ha puesto de manifiesto en esta pandemia que muchos teletrabajaban desnudos) y tantas cosas más, y nos gustaría que toda la sociedad lo viera con nuestros ojos nudistas, comprendiendo y aceptando que nuestra desnudez es natural y sin ninguna finalidad sexual, impúdica, obscena ni pornográfica.

También es bastante probable que haciendo algunas de estas tareas cotidianas haya podido vernos algún vecin@ y habremos pensado que no se lo debería tomar a mal, pues estamos en nuestra casa y estar desnudo es algo natural para nosotros, sin ninguna intención libidinosa. E incluso si algún vecin@ nos hubiera increpado exaltad@ al vernos desnudos, seguramente le contestaríamos que el conflicto no está en nuestro desnudo, sino en los ojos que lo miran.

Por otro lado, hemos alabado a las administraciones y ayuntamientos que han tenido en cuenta las peticiones nudistas favorecedoras del nudismo social,  y vamos ganando espacios como los parques públicos existentes en Francia y Alemania, y hemos aplaudido a aquellos empresarios que han aceptado el nudismo en muchas de sus actividades, como restaurantes que permiten comer desnudos, museos que organizan visitas nudistas, teatros que organizan representaciones para que el público pueda verlas desnudos y gimnasios y boleras que permiten disfrutar de ellos sin tener que llevar ropa,  y lo vemos como algo positivo y que además ayudaría a la normalización y aceptación del nudismo en la sociedad.

Después de esta amplia introducción de lo que nos gustaría hacer como nudistas, vamos a centrarnos en el objetivo de este artículo, que es poner de manifiesto algo que nos hemos dado cuenta y nos ha llamado la atención y es que, en muchas ocasiones, ¡¡ la censura al nudismo es llevada a cabo por los propios nudistas!!

Hace tiempo publicamos una noticia que conocimos sobre una mujer británica que, a raíz de una petición de un naturista, decidió crear una empresa de servicios orientada al público nudista, donde se ofrecía la posibilidad de “ropa opcional” en servicios de limpieza. Y la verdad, nos han asombrado un poco algunas de las respuestas generadas por el mismo, sobre todo si estas provienen de seguidores que, imaginamos que son nudistas, y más si esas opiniones son consecuencia de haber leído, no solo el título, sino todo el artículo.

Estas respuestas que ponían en duda la idoneidad de este tipo de trabajo variaban desde la posible “peligrosidad” de los productos de limpieza al ir desnudos, a la “confusión” que pudiera producir por la sexualización y/o “pornolización” del mismo o bien consideraban que no tenía ninguna relación con el nudismo/naturismo, siendo algunas respuestas bastante descalificantes respecto a esta iniciativa.

Y dentro de la variedad de respuestas, la que más nos preocupa es la que ha entendido esta iniciativa inadecuada por la sexualización que se hace de la misma… ¡¡viniendo de gente que se considera nudista!! 

Entendemos que desde una perspectiva textil se podría focalizar en el aspecto sexual de esta propuesta, pero ¿un nudista no ha pensado en esta posibilidad empresarial (o cualquier otra) desde una perspectiva sana, natural y realmente nudista?

Nos asombraría pensar que tú, que eres nudista, preferirías tener que vestirte cuando necesitaras en casa un profesional de la limpieza (o de cualquier otra actividad) y también te sentirías ofendido@ si ese profesional decidiera poder realizar su trabajo desnud@.

El pasado mes de Diciembre, nuestros amigos y compañeros de la AAPN Cantarriján publicaron en su blog un estupendo artículo, que os recomendamos leer, titulado “Yo creo (en el) Nudismo”, donde ponían de manifiesto como nos “autocensurábamos” nosotros mismos en una actividad fotográfica navideña, pues aunque las fotos se publicarían en su web, lejos de la censura inquisidora que aplican las redes sociales, la mayoría de las fotos que se enviaron habrían superado la censura de dichas redes sociales. 

En dicho artículo exponen que, "aparte de realizar una “influencia activa” en lugares de tradición nudista, el mostrarnos desnudos realizando las diversas actividades que hacemos lo consideramos más que necesario para que la gente empatice, conozca y entienda que es una opción tan respetable como otra cualquiera y que vea que nuestro cuerpo desnudo es algo natural y que las connotaciones sexuales solo pueden estar en los ojos del que espera encontrarlas”

Estos ejemplos nos llevan a plantearnos las siguientes preguntas: 

¿Son algunos (¿o muchos?)  nudistas los propios censores o incluso sexualizadores del desnudo?

¿Estamos acostumbrados a que el nudismo sea sexualizado y esto nos hace asumirlo a nosotros mismos?

¿Los nudistas también miramos con ojos textiles?

Nosotros elegimos ir en otra dirección, preferimos mirar con nuestros ojos nudistas y escogemos no censurar ni criticar cualquier acción que ayude a promocionar y normalizar el nudismo, adhiriéndonos a la visión que propusieron desde AAPNC:  

Yo creo en el nudismo… ¡yo creo nudismo!

Y tú, ¿con qué ojos miras?

Nakedu