Lo mas bonito del mundo

 

No hay cosa más incomprensible para mí que el pudor que sienten muchas mujeres al mostrar sus pechos. Me gusta ponerme en el lugar de los demás y empatizar para poder comprender distintas situaciones o actitudes, pero me resulta complicado de entender cuando esas actitudes no se analizan, no se les busca una razón lógica para seguir inmersos en ellas.

This Is Motherhood. Alex Baker

El pudor a enseñar los pechos femeninos y el morbo por parte de los hombres hacia ellos es algo totalmente cultural y fuera de toda lógica, siempre a mi humilde entender.

Virgen de la leche. La Roldana

Todo esto viene a cuento porque hace unos días estuve visitando el museo de Bellas Artes de Sevilla donde se expone una reciente adquisición del museo, La virgen de la leche (1689-1706). Es un relieve en terracota firmado nada menos que por Luisa Roldán, La Roldana.

Virgen de la leche. Maestro de don Álvaro de Luna

Esta iconografía, normalmente llamada Virgo lactans o Virgen de la leche, tuvo una alta demanda en el Barroco con una importante presencia tanto en las clausuras femeninas como en la devoción privada. De hecho tenemos numerosas muestras de la virgen dando de mamar al niño por toda la geografía nacional. Desde la que se encuentra en la catedral de Santiago, de la misma autora o en los conventos de carmelitas de Málaga o de san Antón de Granada.

Estamos hablando del siglo XVII en la plenitud del barroco, pero también hay muestras de este tipo de representaciones en el siglo XV como la que se conserva en museo del Prado obra de Maestro de don Álvaro de Luna, o las magníficas representaciones que se encuentran en la catedral de Burgos todas denominadas Virgen de la leche, por poner solo unos pocos ejemplos.

En muchas cosas vamos para atrás, como los cangrejos y ya es un tema que hemos tratado muchas veces respecto al cuerpo humano, a un pudor que no tiene lógica. Como he dicho antes me gusta ponerme en la piel de los demás e intentar comprender los pudores y vergüenzas respecto al cuerpo y llego a entender que la parte de los genitales sea algo muy íntimo y que cueste descubrirse.

Pero los pechos no son genitales, en este punto tiene mucho que ver las modas en el vestir y las elucubraciones puritanas de las diferentes religiones, que también cambian con las modas aunque a otro ritmo. El morbo que provoca lo prohibido, hace el resto.

Es a mi parecer aberrante que esos prejuicios y complejos se implanten en las tiernas mentes infantiles, provocando que lo natural se convierta en pecaminoso y no solo en el ámbito religioso. La parte de arriba de los bikinis en niñas que apenas han comenzado a andar es un claro ejemplo que vemos con asiduidad en nuestras playas y piscinas.

¿ Como vamos entonces a ver con naturalidad el acto más bonito del mundo como es el de una madre amamantando a su hijo ? ¿ Como vamos a evitar que a una mujer se la increpe por amamantar a sus hijos en un espacio público, que se la invite a retirarse a un sitio privado o a taparse pudorosamente ?

El pecado, lo sucio e indecoroso, solo está en los ojos de la gente. El admirar una pintura de siglos atrás y acto seguido escandalizarse y repudiar lo natural que pasa a nuestro lado, no es coherente. Al menos así lo veo yo.

Quique

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