domingo, 26 de diciembre de 2021

La artista Kristine Schomaker se atreve a verse desnuda a través de los ojos de sesenta artistas


En su primera exhibición en un museo, la artista de tallas grandes desafía las ideas de imagen corporal, belleza y autoaceptación con Perceive Me, que se exhibirá en MOAH Cedar hasta el 12 de diciembre.



En "Perceive Me", la artista de tallas grandes Kristine Schomaker nos desafía a examinar nuestra aceptación de las diferencias, especialmente relacionadas con el tamaño. Posó para 60 artistas para hacer retratos desnudos de su forma más grande que el promedio; los resultados son una celebración de y para cualquiera que alguna vez se haya sentido menos que hermoso.

Con “Percíbeme”, Schomaker encontró una manera de estimular pensamientos serios y conversaciones importantes sobre aceptarse a sí mismo. Su trabajo a menudo ha tocado las percepciones del cuerpo femenino, un tema que ha sido un desafío para ella desde su juventud. Odiaba que le tomaran una foto porque no quería que su cuerpo y su rostro, que consideraba menos que ideales, fueran conmemorados en fotos. Desarrolló un trastorno alimentario, pero nunca perdió de vista la necesidad de expresarse en su arte.



"Nunca había escuchado a tanta gente entrar en la galería y hacer una especie de exclamación de sorpresa", dijo Peter Tyas, director ejecutivo de Studio Channel Islands. “Todos los que han entrado, independientemente de dónde se encuentren en el espectro de tener una educación artística. . . se sorprende de cómo reaccionan. Y esa es la marca de una gran exposición ". Tyas señala que la exposición es" intencionalmente provocativa "y" atrevida "porque" celebra la valentía de estar desnudo frente a alguien, y la valentía de aceptar tu propio cuerpo y presentar tu propio cuerpo para que otros lo acepten ".



Esta primera exposición de museo de "Percíbeme" está a la vista en MOAH: CEDAR en Lancaster CAdel 9 de octubre al 12 de diciembre de 2021. La exposición se inauguró originalmente para una instalación de un mes en la Galería de Bellas Artes Ronald H Silverman en la Universidad Estatal de California, Los Ángeles el 25 de enero de 2020 y recientemente concluyó una exhibición de siete semanas en Studio Channel Islas. Después de MOAH: CEDAR, "Perceive Me" viaja a la Galería de Arte de Mesa Community College y a la Galería de Arte de Coastline Community College en 2022.



Los artistas que colaboraron en el proyecto incluyen a Amanda Mears, Anna Kostanian, Anna Stump, Ashley Bravin, Austin Young, Baha Danesh, Betzi Stein, Bibi Davidson, Bradford J Salamon, Caron G Rand, Carson Grubaugh, Catherine Ruane, Chris Blevins-Morrison, Christina Ramos, Cynda Valle, Daena Title, Daggi Wallace, Dani Dodge, Debbie Korbel, Debby y Larry Kline, Debe Arlook, Diane Cockerill, Donna Bates, Elizabeth Tobias, Ellen Friedlander, Emily Wiseman, Geneva Costa, Holly Boruck, J Michael Walker , Jane Szabo, Janet Milhomme, Jeffrey Sklan, Jesse Standlea, John Waiblinger, Jorin Bossen, K Ryan Henisey, Karen Hochman Brown, Kate Hoffman, Kate Kelton, Kate Savage, Katherine Rohrbacher, Kerri Sabine-Wolf, Kim Kimbro, L Aviva Diamond , Leslie Lanxinger, Mara Zaslove, Marjorie Salvaterra, Martin Cox, Monica Sandoval, Nancy Kay Turner,Nurit Avesar, Phung Huynh, Rakeem Cunningham, Serena Potter, Sheli Silverio, Susan Amorde, Susan T. Kurland, Sydney Walters, Tanya Ragir, Tony Pinto, Vicki Walsh.



Kristine Schomaker es una artista multidisciplinar, historiadora del arte y comisaria afincada en Los Ángeles. Recibió su licenciatura en Historia del Arte y una maestría en Arte de Estudio de la Universidad Estatal de California en Northridge. Schomaker ha estado exhibiendo su trabajo desde finales de la década de 1990. Ha tenido exposiciones individuales en Los Ángeles, incluyendo "Plus" en Ark Gallery en Altadena, "Mirror, Mirror!" en Gallery H Phantom Galleries LA, Hawthorne, California, "And One Man in His Time Plays Many Parts" en Los Angeles Art Association, "Plus" en Moorpark College Art Gallery, "A Comfortable Skin", en Kerckhoff Hall Art Gallery UCLA , Los Ángeles, California y "Ce n'est pas une Peinture", en TRACTIONARTS, Los Ángeles, California. Schomaker también ha aparecido en numerosas exposiciones colectivas. Además de trabajar como artista en ejercicio.


Kristine Schomaker presenta la exposición inaugural de "Perceive Me" en Cal State LA, enero de 2020.


Fuente: https://www.einnews.com/pr_news/556007064/artist-and-cultural-instigator-kristine-schomaker-dares-to-see-her-nude-self-through-the-eyes-of-sixty-artists

jueves, 16 de diciembre de 2021

El Portús, un paraíso para las familias nudistas

Si sois padres de una familia naturista me imagino que os habréis planteado llevarla a un sitio en vacaciones, sobre todo, donde os podáis sentir, además de a gusto, seguros y libres de cámaras, mirones, salidos o energúmenos que os digan que "no pensáis en los niños".

Los que no me conozcáis os contaré que tengo un podcast que habla del nudismo naturismo en todas sus formas como relación social, intentando desmitificarlo y presentándolo como lo que es, algo natural. Y para ello expongo mis reflexiones y experiencias junto con las de mis invitados, gente cercana y con la que identificarse resulta fácil.

¿Te has preparado para leer este artículo? Porque si esperas que sea cortito vas apañado ¿Eres de los que se pone el narrador de voz a x1,5 para quitártelo de encima rápido? ¿o eres de los que te relajas en el sillón con tu bebida favorita y una música que te lo permita leer? Te invito a lo segundo. ¿Qué no sabes qué música poner? Si hoy te dejas recomendar por mí ponte algo de Smetana, en concreto "El Moldava", tranqui no es reguetón. Y no te dejes engañar, no tengo ni idea de música clásica, alguien que sí sabe me la recomendó a mí.

Yo hoy os vengo a recomendar el camping naturista El Portús. Si eres nudista en España probablemente ya habrás oído hablar de él, porque es muy popular entre nosotros, pero probablemente no te lo hayan contado como lo voy a hacer yo ahora.

Empecemos por el entorno.

Este camping está en plena sierra de "La Muela" en el valle donde se asienta el municipio cartaginense de "El Portús", en la provincia española de Murcia. El camping es colindante con la playa de "La Morena", de tipo pedregosa. El entorno está rodeado de acantilados, cuevas y aguas cristalinas.

Tendríais que ver la cara de mis hijos cuando les hemos aficionado al snorkel gracias a la gran variedad de especies , peces de todo tipo, pulpos, erizos y estrellas de mar… y si, los erizos obviamente también son de mar, pero quedaba mal repetir la palabra.

Variedad de peces y estrella de mar


Los que vais con niños pequeños, o tenéis algún tipo de movilidad reducida lo recomendable es situarse por la parte sureste de la misma. Venga va, no seré pedante, entrando en la playa a la izquierda del todo. ¿Y por qué ese sitio? Pues porque el acceso al agua es más llano y por tanto más fácil. El resto de la playa, el acto de entrar en el agua se vuelve deporte de riesgo al tener un escalón muy pronunciado por el que tus pies se deslizan y hunden incontroladamente entre las piedras.
 
Y aprovecho para hacer una petición a la dirección del camping desde aquí (como si me fueran a leer, ¡qué moral tengo!), ya que hay un acceso desde este a la playa en su parte sureste (venga va izquierda, mirando al mar), estaría muy bien, para los que van en sillas de ruedas, una pasarela a esa zona para que se les facilite el acceso al agua.
 
Ya que estamos aquí, indicar que en ese lado de la playa se puede acceder a las antiguas ruinas de lo que parece una defensa artillera (si me equivoco ponerlo en los comentarios). Y si continúas el camino puedes hacer senderismo nudista hasta llegar a la Cueva de Vistalegre, muy característica por ser la que se ve desde el camping arriba de la montaña. Ojo, yo no lo recomendaría, pero si vais con niños pequeños, hay pozos llegando a esta cueva que pueden ser muy peligrosos, sobra decirlo, pero no les perdáis de vista. Cuando lleguéis tendréis unas vistas como estas:

Vistas desde la cueva de Vistalegre


No os creáis que es lo único que se puede ver por allí, este año el lumbago no me lo ha permitido, pero en otra ocasión que repita no me perderé las rutas en kayak que podéis contratar en el pueblo. Nos comentaron de varias posibilidades y todas muy atractivas por ejemplo visitar playas inaccesibles a pié, o sumergirnos en cuevas de agua dulce, no son baratas, pero creo que merece la pena probarlo al menos una vez en la vida.
 
Y si se os da por salir del camping (cosa que nosotros este año no nos apetecía, sinceramente) podéis visitar la ciudad de Cartagena, que está llena de lugares interesantes. Se puede disfrutar de las playas del Parque Regional de Calblanque que dispone de muchos sitios donde poder practicar el nudismo, ojo, porque el coche se deja en el parking y se baja a las playas en el autobús que han habilitado, y que hay que pagar, claro. Y como última recomendación podéis ver los cañones en las defensas elevadas de la Batería de Castillos.

Playa de Calblanque



La estancia

Por motivos de agenda laboral, el permitirnos ir de camping es algo que sólo podemos hacer en las vacaciones estivales, y no nos lo habíamos planteado hasta ahora. Además, mi mujer no sabía cómo iba a llevar la experiencia de dormir en el suelo, así que tanto en el 2018 como ahora en el 2021 nos decantamos por alquilar un bungalow para pasar nuestros 15 días.
 
Todo hay que decirlo, no es barato, y nos ha costado ahorrar dos años para poder permitírnoslo, pero el esfuerzo nos ha merecido la pena. Y os aseguro que el camping no me ha pagado la estancia para hacerles publicidad, de hecho, no tienen ni la más mínima idea de quién soy que, aunque intenté ponerme en contacto con el gerente para entrevistarle no llegó contestación por su parte.
 
Los tipos de bungalow están detallados en la web del camping, así que no os voy a aburrir con una explicación muy larga. Nosotros estuvimos en el de tipo B, tres habitaciones, aire acondicionado y este año nos tocó en la parte más alta del camping con unas vistas como estas:

Paisaje desde el bungalow


Ya con esto sobra todo lo que pueda decir… se acabó el artículo, que va, pues no me gusta enrollarme, madre mía. ¿Cómo va esa bebida favorita? Como me estéis escuchando con el narrador de voz os estaréis perdiendo todas las fotos y enlaces que he puesto, vosotros veréis. Por cierto, las fotos son mías.
Lo dicho desde el porche desayunábamos, comíamos y cenábamos, viendo caer el sol por las montañas hasta anochecer. Espectacular es decir poco.
 
Contras del bungalow, el sillón no es para tirarse viendo una película con comodidad, ni los colchones medianamente firmes, llevaros vuestras almohadas, sólo podíamos cocinar con uno de los fogones de gas por su escasa llama y la televisión tiene menos pulgadas que el monitor desde el que estoy escribiendo este artículo. 

Interior del bungalow



Pero nuestras quejas llegan hasta ahí, os aseguro que el resto de cosas que disfrutábamos hacían que estas parecieran nimiedades.
 
Por la experiencia anterior de estos años nos llevamos un ventilador de pie, la plancha y la barbacoa eléctrica, repelente de mosquitos y alargadores de corriente eléctrica. Pero si veis que os falta algo decidlo en la recepción, porque se vuelcan en vuestra comodidad, damos fe.
 
De las parcelas sólo puedo contaros lo que he visto y lo que me han contado. Por lo general, no es necesario reservar para acampar en verano. Las parcelas están habilitadas con y sin luz, y las hay de sobra para meter grandes tiendas o caravanas. No esperes sombras, y lleva una buena maza para las piquetas, te hará falta.
 
No nos parece bien que el camping, para el acceso de un día,  no permita pagar con tarjeta cantidades inferiores a 15 € ya que unos amigos nuestros que vinieron a pasar el día con nosotros, casi no pueden pasar por no tener el dinero en metálico, si no es porque bajé a pagar con un billete los 10 € lo mismo nos hubiera tocado bajar hasta el pueblo más cercano a buscar un cajero automático. Hay cierta polémica porque cobran por la entrada, pero a nosotros esto no nos parece mal, si el que va, hace uso de sus instalaciones. Existe la posibilidad de que quieras llegar a la playa pero no usar las instalaciones del camping y para eso no necesitas pagar la entrada, pero sí que te acompañará alguien del personal del camping para asegurarse de que mantienes las normas sociales, como por ejemplo no hacer fotos y vídeos. Creo que se puede entender.
 
Los servicios del camping están bien, los baños son mixtos, lo cual es lógico ¿no?. Y no es que sean los mejores en los que he estado, pero he estado en muchos peores, y hay uno en concreto, al lado de la piscina, que lo han reformado y está muy bien. Hay servicio de lavandería (que no sé quién lo usará… es broma), el restaurante da buenas comidas (aunque han quitado los menús diarios), el supermercado de Rosa (la nueva gerente desde la pandemia) que tiene una gran variedad de artículos a un precio de barrio, el chiringuito de la playa, el puesto de masajes, y los chicos y las chicas de mantenimiento y recepción, que son muy majos.

El supermercado de Rosa



Otros años también tienen monitoras infantiles, las cuales tienen entretenidos a los peques un par de horas por la mañana y otro par de horas por la tarde, y esto es genial para ellos, ya que conocen a otros niños de sus edades con los que hacen grupos de amigos. Además de todas las actividades como gymkhanas, disfraces, manualidades, escalada y muchas más. Este año con el tema de la pandemia no se ha podido, pero si otro año están podéis dejarlos con toda la tranquilidad del mundo y vosotros aprovechar para disfrutar un ratito solos, que no está mal tampoco.
 
Dónde abastecerse

El primer día que llegas, con el cansancio del viaje, no es que te apetezca hacer mucha compra, por lo que tienes tres opciones si no vas con nada preparado. El primero comprar algo en el supermercado de Rosa, algo siempre tiene que te apaña. Dos, pedirte algo de comer en el restaurante del camping, que hace unas paellas estupendas y no tienes que desplazarte con el coche. O por último acercarte al bar/supermercado Casa Ramirez e Isabelita que os encontraréis en la carretera que va hacia el camping a menos de dos kilómetros de este, en el cual podréis comprar unos bocadillos o incluso comer allí los platos precocinados, tienen una pinta estupenda.
 
Para hacer la compra "gorda" tendréis que acercaros al pueblo de Canteras a 6 kilómetros del camping (algo menos de 10 minutos en coche) y donde están todos los servicios de abastecimiento que os imaginéis, farmacia, restaurantes, supermercados Día y Mercadona, y la carnicería Jesús Valera (en Google aparece como Charcutería Otón) que nos han atendido estupendamente y que tienen un género bastante decente, de aquí hemos probado sus alitas de pollo a la mostaza y miel, un chuletón, pinchos morunos, chuletas de cordero, chorizos y otros preparados como tortas y fajitas rellenas de carne que hacen ellos. Una delicia, se me hace la boca agua de recordarlo.

Carnicería Jesús Valera


El ambiente social

¿Qué ambiente se respira en este camping? Pues un ambiente muy familiar, gente muy cordial y ningún comportamiento sexualizado sospechoso. Por si alguien no se había dado cuenta, en nuestro ambiente se mueven bastantes parejas swingers, y si alguien está pensando en "Cap d'Agde", esto es todo lo contrario, en absoluto sexualizado, es decir, lo que debe de ser un lugar naturista.
 
El ejemplo de ambiente lo podemos poner nosotros con nombres que me gustaría mencionar.
 
Alexis por demostrarnos ser un ejemplo de educación y respeto desde el minuto 1, divertido, con el que se puede hablar de cualquier tema y con un trato hacia mis hijos excepcional, mi hijo me ha preguntado que a ver cuándo viene por casa que quiere mostrarle sus avances en los videojuegos .
 
A Alexis le conocimos por el grupo nudista de Telegram, al igual que a Toni y Silvia, con la que pudimos compartir la comida y la cena (a la que nos invitó) y estuvimos encantados de que nos acompañara ese día.
 
También pude cruzar algunas conversaciones con un miembro de la asociación nudista murciana ANCC, Alfonso al que le acompañaba su hijo. Charlamos sobre la situación de la asociación y algunas ideas que tenían en mente llevar a cabo.
 
Y mediante el contacto de Carmen Saura (nudista activista y sexóloga que entrevisté en mi programa) conocí a Celia, que estuvo trabajando en el camping años anteriores y que también demostró una vitalidad envidiable.
 
También nos reconoció por pertenecer al foro de “Sinropa” una pareja majísima, Sergio y María, y nos saludaron el último día que se regresaban a su casa, una lástima no haber coincidido con ellos más días, porque nos sentimos muy cómodos.
 
Y luego hemos tenido conversaciones con varias personas, como por ejemplo una mujer con su hijo (al que le recuperé un zapato que se le había caído), nos contaba cómo había vivido el nudismo desde pequeña en el camping y hoy lo seguía transmitiendo a su familia, y contrariamente a lo que algunos piensan por ahí, no sólo sin causar ningún trauma sino sintiéndome liberada por completo y repitiendo año tras año su estancia en este paraíso. Tengo que reconocer que estuve a punto de invitarla para ser entrevistada en el podcast, pero todavía me da vergüenza asaltarle a alguien así cuando apenas me conocen.
 
Nuestros hijos también hicieron sus amiguitos y nos hemos quedado con el teléfono de sus padres por si volvemos a reencontrarnos.
 
Creo que os podéis hacer una idea del ambiente que allí se respira. Respeto y cordialidad.
 
Que tontos hay en todas partes, pero estadísticamente allí se reduce considerablemente.
 
Conclusión
No tengáis miedo a compartir el desnudo con vuestros hijos, os recomiendo a cualquier familia que paséis un veraneo juntos disfrutando de la desnudez y si es en un sitio como El Portús, mejor. Y en España tenemos el privilegio de disponer de varios sitios más así, pero el resto todavía no los conocemos, este sí, y nos encantó.
 
Permitidme un consejo, hablad con vuestros hijos, sobre todo cuando llegan a edades, como los míos de 10 y 12, donde son mucho más conscientes de sí mismos y del entorno que les rodea.

Una familia nudista cualquiera



Este año mi hija no ha querido desnudarse y se lo respetamos incondicionalmente, otra cosa es que, en el camping, la piscina tenga una norma muy básica, se disfruta completamente desnudos, y ella lo ha sabido aceptar, se ha sentido acompañada por nosotros y se ha desnudado sin problema junto a su hermano. Y dentro de la piscina han jugado con otros niños de su edad en una completa naturalidad. Y mi hijo de 10 nos lo dejó muy claro también "si vais a un sitio donde estén desnudos yo también lo hago", es lo suficientemente consciente para contextualizar y adaptarse a la situación de la forma más natural.
 
Terminaré con una reflexión. Si sois nudistas no se lo escondáis, porque si un día lo descubren pensarán que lo hacéis porque es algo malo, y los malos no somos los que nos desnudamos, sino los que no pueden controlar sus impulsos al vernos.
 
Aquí termina nuestra aventura veraniega, espero que os haya resultado interesante e incluso os anime a vivirla. Y si os habéis quedado con ganas de escucharme, pasaros por mi podcast "Naturalmente Pod" y podréis escuchar muchas historias más.

Rubén

lunes, 6 de diciembre de 2021

Terapia desnuda

 
Curas naturistas, fotografía terapéutica: varios fotógrafos se quitan la camisa para promover la salud y la autoestima.



En el vigorizante lecho de un río. Sobre piedras cubiertas de musgo. O entre las hojas de un robledal. En algún lugar de la Suiza francófona. La fotógrafa de Lausana Nirine Arnold invita a sus modelos a convertirse en un solo cuerpo, desnudos, con la naturaleza. Estas sesiones individuales forman parte del auge de la fotografía terapéutica. Diferentes fórmulas tienen como objetivo mejorar la aceptación corporal y la autoestima. “Al ponernos en el centro de la imagen, nos ponemos en el centro de nuestra vida. Sin ropa, dejas de querer esconder una línea debajo de una cintura alta o un pecho demasiado pequeño en una copa acolchada. Realmente te conviertes en ti mismo: es una experiencia liberadora la mayor parte del tiempo”, testifica la trabajadora social de formación.

Este servicio, desarrollado por varios fotógrafos francófonos, incluye al menos una entrevista preliminar destinada a identificar necesidades y generar un clima de confianza, así como una valoración durante la renderización de las imágenes. Convencido de que ser fotografiado puede eliminar las inhibiciones y sublimar la feminidad, Lennart Goldmann desarrolló esta “especialización” en su estudio-mansión en Haute-Savoie, a media hora de Ginebra. Se rodea de su esposa para destacar a las mujeres vulnerables y contribuir al desarrollo de sus personalidades. Ya sea que se practique de manera intuitiva o formal, la fotografía terapéutica es una disciplina que se puede enseñar. Sébastien Mory, con sede en Marly, se formó en 2019 con la psicoterapeuta y fototerapeuta belga Emilie Danchin. Lo practica en su estudio, en el centro de atención, partiendo de la imagen que hombres o mujeres tienen de sí mismos y de las áreas con las que quieren llegar a un acuerdo.

"Sin un símbolo de vestimenta, todos estamos en el mismo barco. La aceptación del propio cuerpo, del de los demás y de sus imperfecciones, se vuelve muy fácil" Diana Ruiz para T Magazine

“Utilizada como herramienta de desarrollo personal, esta exposición fotográfica muestra beneficios asombrosos”, confirma Séverine Mürner, sexóloga clínica y terapeuta de Imago de Ginebra, que ofrece sesiones fotográficas al aire libre o en su oficina. El hecho de posar, de ser supervisado, de visualizarse desde diferentes ángulos, posturas, contextos, involucra una gran cantidad de mecanismos psicológicos y emocionales. Es un enfoque totalmente disociado del marco terapéutico habitual, que permite una transparencia y autenticidad particulares”.


Todos los mismos

Por lo tanto, esta terapia suave ayuda a dominar la imagen corporal al observar objetivamente sus cualidades, fortalezas y debilidades. Restablece un vínculo benevolente con el cuerpo, particularmente beneficioso para las personas que han sufrido una experiencia traumática como trastornos alimentarios, aumento de peso o pérdida, cirugía, enfermedad, duelo, ruptura romántica o pérdida de un trabajo.


Al eliminar todos los artificios que obstaculizan el cuerpo, la fotografía terapéutica es parte de la creencia naturista que los humanos ganan al quitarse la camisa. Los testimonios de veraneantes sin traje de baño apoyan esto: “El acto de desvestirse cuando llegas es un alivio. Sin un símbolo de vestimenta, todos estamos en el mismo barco. Aceptar tu propio cuerpo, el de los demás y sus imperfecciones se vuelve muy fácil ", relata un ginebrino de 40 años que trabaja en la industria del circo.

Según Jean-Lou Dumon-Carbonnet, presidente de Imaginat, asociación francesa que agrupa a artistas y personas de la cultura naturista, el hecho de soltar el uniforme, la armadura o el caparazón cotidiano permite salir de los complejos al vestuario. “En los lugares naturistas”, confirma, “se borra toda discriminación, origen social y étnico, género, salud, nivel intelectual, cicatrices o discapacidades corporales. La sensación de bienestar también se ve incrementada por la ausencia de filtros entre la naturaleza y uno mismo. Empezando por la respiración, tan imprescindible, que ya no se ve obstaculizada”.


Siente tu identidad

La dimensión terapéutica del naturismo siempre ha sido parte integral del enfoque: según la región del mundo, se utilizan baños termales, saunas o baños de hielo. "Es un proceso de salud física y mental. El naturismo no cura todas las dolencias, pero ayuda a valorar tu cuerpo y fortalecer sus defensas inmunológicas”, especifica el presidente de Imaginat, que lleva desarrollando curas detox desde 2019 combinando prácticas de terapia corporal con una dieta específica. Y planea organizar cursos de terapia de desnudos que combinen fotografía y artes visuales durante los cuales cada participante se turnará para posar.



En el período entre guerras, durante el desarrollo del naturismo en Francia, la desnudez fue vista desde el principio como la condición para disfrutar de los efectos positivos de la naturaleza. Lejos de ser una simple afición, esta práctica reformista con valores muy fuertes tenía como objetivo crear, además de las civilizaciones alienadas por el modernismo, una contra-sociedad que supuestamente salve a la humanidad. "Los defensores del naturismo ven a los individuos como árboles que extraen energías de los flujos vitales de la naturaleza - el sol, el aire, el agua - para mantenerse sanos, endurecerse y vitalizarse", recuerda el investigador francés Sylvain Villaret, autor de la Historia del naturismo en Francia desde el Siglo de las Luces publicado en 2005 por Editions Vuibert. Sentir el propio cuerpo es sentir la propia identidad, es crear un sentido de sí mismo: una respuesta a la búsqueda colectiva de sentido, ante el sentimiento de vacío, la fatiga de ser uno mismo en nuestras sociedades individualistas.


Fuente: https://www.letemps.ch/societe/therapienuutm_source=facebook&utm_medium=share&utm_campaign=article

Las fotos pertenecen a @faraco.art para su proyecto La voz del cuerpo. 


viernes, 26 de noviembre de 2021

Me niego a que mis hijos se avergüencen de sus cuerpos.

Hace ya más de 3 años publicamos un artículo que titulamos El desnudo doméstico en la que narrábamos la historia que le ocurrió a Torben Chris tras publicar una fotografía en la que estaba bañándose con su hija de dos años.

Hoy queremos compartir otra historia, contada por Natalie Romero, en la que nos relata sus pensamientos, dudas y cómo actúa para que sus hijos no se avergüencen de sus cuerpos.

Me niego a que mis hijos se avergüencen de sus cuerpos. Por eso nuestra casa es nudista.

Solía ​​sentarse cómodamente en la silla hinchable en el suelo fuera de la bañera todas las mañanas mientras yo me duchaba. Instalé una cortina de ducha transparente y cantaba canciones y jugaba al escondite y, a veces, él agitaba su sonajero para entretenerse y poder comenzar cada mañana fresco y limpio.




Esto se convirtió en una tradición y, a medida que crecía, se levantaba de la cama con su pijama de pies, arrastraba su manta y se sentaba en la alfombra tan pronto como escuchaba la ducha. A veces abría la cortina de la ducha y veía su carita somnolienta y ni siquiera me había dado cuenta de que estaba allí. Otras veces, se lanzaba listo para contarme sobre los pensamientos aleatorios que corrían por su gran mente de niño pequeño. 

Siempre estaba desnuda y ambos nos sentíamos cómodos con esto.

De hecho, todos estos años después todavía nos sentimos cómodos con nuestra desnudez.

Toda nuestra familia parece sentirse cómoda con la desnudez.

Nos cambiamos uno frente al otro, a menudo compartimos un puesto en el vestuario familiar en la piscina y nos duchamos con la puerta del baño abierta.



No es anormal que mis hijos entren en nuestra habitación para contarnos alguna anécdota de su día mientras se quitan la ropa de la escuela y se ponen sus pijamas. Mi hijo todavía me habla a través de la cortina de la ducha y muchas veces es cuando se siente cómodo hablando de temas difíciles.

A veces, se quitan los trajes de baño mientras están en la piscina, tan emocionados de nadar desnudos.



En nuestra casa nos sentimos tan cómodos de pie uno frente al otro desnudos como en pantalones de chándal y una sudadera con capucha.

Esta ha sido la forma de vida de nuestra familia desde el principio, pero ahora que nuestros hijos están creciendo, empiezo a preguntarme cuánto tiempo puede continuar. ¿Habrá una era mágica en la que se volverá extraño o incómodo?

¿Caminar desnuda frente a mis hijos tendrá algún impacto negativo a medida que crecen hasta la preadolescencia?

Soy perfectamente consciente de que no todas las familias funcionan así. Para nosotros, siento que esta es una de las formas en que abordamos los límites. Cada uno de mis hijos está aprendiendo a establecer sus propios límites y a tener control sobre su propio ser físico.


Hablamos abiertamente sobre nuestros cuerpos en nuestra casa. Qué hacen nuestros cuerpos, cómo mantenerlos limpios y saludables, cómo fortalecerlos. Se les ha educado sobre la pubertad y los cambios que van a experimentar sus cuerpos en el futuro cercano.

Siempre hemos tenido conversaciones abiertas sobre buenas y malas caricias. No creemos en obligar a nuestros hijos a abrazar o besar a nadie, incluidos nosotros como padres .

Sin embargo, estoy desgarrada.

Estoy dividida entre alentar a mis hijos a aceptar y apreciar su desnudez y presionarlos para que sean más pudorosos y privados. No quiero que mis hijos se sientan avergonzados de sus cuerpos.

Con dos atletas que tienen marcos muy diferentes, también están aprendiendo que no hay dos cuerpos iguales. No siento la necesidad de ocultar mi barriga blanda o las estrías que han aparecido en mis muslos y mi hijo aprecia el músculo magro en su delgada figura. No criticamos nuestro cuerpo y no sentimos vergüenza por cómo estamos construidos.

Tratamos de enfocarnos en todas las cosas maravillosas de las que nuestro cuerpo es capaz porque la verdad es que a veces nuestros cuerpos nos fallan. Preferimos enfocarnos en tratar nuestros cuerpos con amor y aprecio para que podamos seguir haciéndonos fuertes y saludables.

Me preocupa que si los presiono continuamente para que se escondan detrás de puertas cerradas, perderán esa naturalidad. Es muy fácil quedar atrapado en lo que la sociedad les dice que es una figura perfecta. Quiero que recuerden lo que es real cuando el mundo comience a decirles cómo deben verse.

Por ahora hemos decidido utilizar su comodidad como guía.




Llamamos a su puerta antes de entrar a su habitación. Pido privacidad cuando la necesito. Pero si están de acuerdo tanto con su propia desnudez como con la mía, yo también lo estoy.

Entienden que si bien nuestra casa es el lugar perfecto para que se despojen de la ropa, otros lugares no lo son. Les recordamos que hacer una videoconferencia con sus abuelos mientras alguien está cambiando no es apropiado.




Lo más importante es que todos nos respetemos y nos demos privacidad cuando se nos solicite.

No espero que esto continúe. Nos acercamos a los años de la preadolescencia y tan pronto como empiecen a sentirse incómodos al estar desnudos con su madre, seguiré mi ejemplo y daré un paso atrás. Pero por ahora me niego a hacerles sentir vergüenza en su cuerpo o cuestionar su propio nivel de comodidad.

Ellos son los que toman esa decisión y yo soy la que la respeta.





Fuente: https://www.cbc.ca/parents/learning/view/i-refuse-to-make-my-kids-ashamed-of-their-bodies-so-were-a-naked-house

martes, 16 de noviembre de 2021

Entrevista a Ángel

Los que seguís este blog sabréis que Ángel, además de ser un gran amigo nuestro, es un colaborador habitual del mismo. A él le debemos muchas de las mejores fotos que hemos publicado y además ha colaborado siendo autor de varios de nuestros artículos.

Para nosotros, Ángel es el ejemplo ideal de cómo vivir la filosofía nudista y además posee otras muchas cualidades y facetas que hoy, a través de esta entrevista que nos ha concedido, vais a conocer.

Queremos agradecerle de todo corazón que nos haya permitido abrir un poco una rendija a parte de su vida personal y esperamos que disfrutéis tanto de esta entrevista como nosotros disfrutamos de su amistad.

Cuando lo pruebas, no hay vuelta atrás. - © ajspimentel

_ ¿Cómo te iniciaste en la fotografía y cómo te empezaste a interesar en la fotografía de desnudo artístico?

Los inicios comenzaron allá por 1987, entonces era un adolescente con una cámara compacta cargada con carrete de diapositivas. Luego tuve la suerte de cumplir el servicio militar obligatorio viajando por el mundo en el buque escuela de la armada española, así que mi padre (amante de la fotografía también), me dio unas nociones básicas para aprender a manejar una cámara réflex totalmente manual. Un curso rápido de unos 15 minutos justo cuando estaba a punto de partir. Aquellos meses me sirvieron para aprender a base de prueba/error. Revelaba los carretes cuando llegábamos a puerto y consultaba mis notas de los datos de exposición de cada foto con las copias reveladas… La mayoría fueron un desastre absoluto, jajaja.

Fui cambiando de máquina réflex cada cinco o seis años, aprendiendo a desenvolverme con ellas de forma autodidacta. La segunda fue una con autoenfoque, la tercera aún analógica pero ya semiprofesional y el paso a la era digital cuando ya estaba al alcance de mi bolsillo (allá por 2006). Fue a partir del momento en el que ya no hubo que pasar por un laboratorio de revelado para tener las copias cuando comencé a disparar algún que otro autorretrato sin ropa, especialmente para tener recuerdos de algunos de los lugares naturistas que visitaba.

Camping Naturista Sierra Natura, Valencia (2009) - © ajspimentel

El desnudo artístico llegó más tarde y como una necesidad de mostrarle al mundo que me rodeaba el punto de vista de una persona procura estar sin ropa tanto tiempo como sea posible y las condiciones meteorológicas lo permitan.


_ ¿Qué quieres mostrar, qué objetivos buscas?

Reflejo la vida cotidiana de un nudista empedernido y trato de normalizarla para ayudar a aquellos que necesitan ese empujoncito para dar el primer paso. También, por qué no, para saciar la curiosidad de esos otros que tienen interés, aunque nunca lleguen a practicarlo.

Fotos trabajando en casa, cocinando, tomándome el aperitivo o alguna más creativa como aquella tras la cena de nochebuena con mi familia: todas reflejan la naturalidad de estar desnudo. Eso es lo que me gusta.

Cena caníbal - © ajspimentel

_ ¿Crees que fotografiar desnudo ayuda a desexualizar la desnudez? 

Rotundamente no.

He recibido mensajes de seguidores en las redes sociales que me demuestran, a pesar de que mi fotografía no es particularmente sensual y menos aún erótica, que la mirada de cada uno es muy particular y creo que la sexualidad está íntimamente ligada a la desnudez, por mucho que los nudistas más puros queramos separarla. Siempre digo que en mis fotos no hay connotaciones sexuales, pero esto depende mucho de los ojos que las miren.


_ En tus fotografías centradas en el nudismo, ¿qué mensaje te gustaría que la gente recibiera a través de ellas?

Libertad, respeto, naturalidad, amor por la naturaleza, por el cuerpo humano…

Tengo que puntualizar que estar desnudo a solas en el monte, en tu casa o donde sea y hacer nudismo son dos cosas diferentes, aunque complementarias. Partiendo de esa base, mi mensaje es que vivir sin ropa es una elección como otra cualquiera y que no hay nada de malo en ello, en cambio aporta beneficios para la salud física y mental. El nudismo es ser capaz de mostrarte al natural ante otras personas ya sea interrelacionándote o no. Esto ayuda a conocerse mejor, a perder complejos, miedos y a sentirse más seguro de uno mismo. ¡Nada como acudir a un lugar naturista para ser consciente de la diversidad y aprender a relativizar!

Mi cuerpo es mío - © ajspimentel

 _ ¿Suele ser una experiencia positiva? 

Hacer fotos desnudo siempre lo es (risas). Si son autorretratos porque me divierte y lo asocio a tiempo libre, momentos de libertad y expansión. Si son de fotos de grupo porque me encanta esa interactuación, sobre todo cuando los participantes cooperan aportando ideas. A menudo no sale la foto que pueda tener en mente, sino otra mucho mejor.


_ ¿Alguna experiencia negativa?

Mi pareja dice que tengo mucha facilidad para olvidarme de lo negativo y creo que le voy a tener que dar la razón, jajaja. 


_ ¿Alguna anécdota que nos quieras contar?

¿Quieres la versión larga o la corta? (risas) Podría contar muchas… ¿Has abierto desnudo la puerta de tu casa al frutero pensando que sería tu hija volviendo de la escuela? ¿Has dejado claro durante los meses de confinamiento por la pandemia que en la terraza comunitaria también había un espacio nudista? ¿Te ha reñido o llamado maricón alguna vez un pastor de cabras por caminar desnudo entre su rebaño? ¿Te ha gritado algún ciclista “¡Abrígate coño!” cuando paseabas por los montes desnudo en pleno invierno? ¿Te has topado con las autoridades en un control mientras conducías sólo con tu camiseta? Porque encontrarte con tus vecinos en una playa nudista o llevarte a tus mejores clientes del trabajo a que conozcan tu playa favorita, ya no es algo que yo considere anécdota, jajaja…

¡Delante de las ovejas no, maricones! - © Nakedu

_ La exposición de fotografías de cuerpos desnudos de todo tipo, ¿crees que ayuda a la aceptación del propio cuerpo?

Estoy convencido de que hay un largo trabajo por delante aún en este sentido, pero a la vez encantado de ver que cada vez hay más artistas que apuesten por la normalización de los cuerpos imperfectos y fuera de las medidas estandarizadas.


_ ¿Qué te inspira, qué tipo de localizaciones son las que te interesan?

Jajaja… Lo de la inspiración es un tema complejo, hay que trabajarla mucho para que no se apague. Hay momentos en los que estás inspirado y no puedes ponerte y viceversa: cuando puedes y ya no te gusta aquello que habías pensado. Pero reconozco que me siento más cómodo cuando estoy de vacaciones, de viaje, en la naturaleza o incluso en una fábrica en ruinas donde no haya nadie observando que en una plaza o en una calle. Eso no quiere decir que no me interese; de hecho, he participado como modelo desnudo entre una multitud de más de mil personas, en la última instalación de Spencer Tunick en Valencia. Uno de mis fotógrafos favoritos, eso sí que es nivel.

Flesh in a factory - © ajspimentel

_ ¿Qué reacciones o interacciones percibes/recibes a raíz de tu trabajo?

Por lo general las reacciones son buenas, imagino que quien me sigue es porque interesa y le gusta lo que hago. Aunque también he tenido trolls en mi vida, con manía persecutoria. Gente que denuncia tus fotos, asociados con la censura absurda de las redes o incluso me envía mensajes para decirme lo cansino que soy…

Reconozco que soy bastante cerrado a comunicarme con alguien cuando no estoy en igualdad de condiciones, así que suelo preferir hablar en foros donde ya conozco a los participantes o intercambiar opiniones a través de los cometarios públicos a pie de foto que por mensajería privada con alguien sin cara, con perfiles vacíos o, peor aún, con intenciones claras de ir buscando otras cosas. Pero de vez en cuando suena la flauta y me topo con alguien que se abre y me confiesa que gracias a mis fotos ha ido a ese lugar del que hablé en alguna publicación o me da las gracias por hacerle descubrir el nudismo y me cuenta que lo ha probado y que ya no hay vuelta atrás… También hay muchos jóvenes (y no tan jóvenes) que me preguntan como hacerse con amigos nudistas como los míos. Es entonces cuando les  hablo, por ejemplo, de las ventajas de formar parte de una asociación nudista.


_ Tu trabajo es de temáticas muy variadas, no solo el autorretrato, sino también las fotos de "diminutos", los "boca abajo" o las que incorporas más personajes como a tu familia o amigos. ¿En qué modalidad te sientes más cómodo?

Me gusta tanto la fotografía que me cuesta decantarme por una sola temática: guardo cientos de capturas de texturas, cielos, monocromáticas, robados callejeros, macros... La fotografía de grupo me parece complicada, pero a la vez muy divertida, además tengo la suerte de tener amigos siempre disponibles incluso para posar desnudos para mí. Confieso que mi pasión es el fotomontaje creativo: podría dedicarle todo mi tiempo libre a esa disciplina, aunque reconozco que mi zona de confort está en el autorretrato. La facilidad de tener al modelo siempre disponible unido a la dificultad de posar para tu propia cámara es un reto interesante en cada nuevo trabajo.

Ni todo aquel que me mira puede verme, ni todo aquel que cree que me conoce sabe quien soy.
-© ajspimentel

_ ¿En las redes sociales, cómo te tratan los censores?

Os voy a decepcionar, no tengo Facebook ni Twitter ni tantas otras como debería tener para llegar a más gente: no podría gestionarlas como me gusta.

Para exponer mi fotografía comencé hace bastantes años en Flickr, una red genial para apreciarla en su más alta calidad y donde puedes etiquetar tus fotos en tres niveles de restricción. Si lo haces bien, no hay ningún problema con la censura, aunque haya desnudos integrales. Desafortunadamente ha venido a menos hasta el punto de dejar de ser interesante.

Instagram está de moda y, aunque no sirve para apreciar una fotografía de calidad, he de reconocer que es una buena herramienta para darte a conocer donde la interconexión con los demás está bien lograda y se llega a cualquier parte del mundo. Tengo amigos que me escriben desde Chile, Canadá, Italia y hasta Corea… Pero, por otra parte, esa globalización hace que sus “normas de la comunidad” sean tan estrictas que pierdes libertad para expresarte con la desnudez. Al final sólo nalgas y pezones masculinos, los femeninos no pueden salir (un sinsentido más). Lo peor es que siento que me condicionan tanto que a veces creo la fotografía ya desde la base, pensando en si voy a poder publicarla o no.

Hasta el momento mi cuenta en esa red social sobrevive desde el principio, pero he tenido cuatro o cinco publicaciones retiradas injustamente y siempre con la consiguiente sutil amenaza del cierre sin previo aviso.

Hora de la siesta - © ajspimentel

_ ¿Cómo ha evolucionado tu trabajo con los años?

He pasado de un tema a otro fluctuando por etapas de más creatividad y otras de absoluto vacío. No me dedico profesionalmente a ella, para mí es un pasatiempo y quiero que siga siéndolo, no me gusta sentirme presionado ni siquiera con retos personales. He probado un par de veces con retos de 52 semanas y mantuve durante cinco años seguidos la locura de publicar una foto bocabajo cada martes. Me aburren las fotos de eventos y ya no me interesa tanto documentar mis viajes con fotografías, como encontrar una buena localización para posibles montajes creativos en el futuro o donde hacerme alguna foto desnudo que sea interesante. Es obvio que ha evolucionado hacia la creación de contenido para la normalización del nudismo como estilo de vida.


_ ¿Has pensado en hacer una exposición de tu trabajo?

¿Una exposición presencial? La verdad es que no. Creo que no tengo material suficiente para rellenar una sala sin llegar a aburrir (risas). Pero sí que he pensado en crear una web para exponer lo más interesante e incluso probar a poner algunas fotos a la venta. A ver si me animo.


_ ¿Cuándo te iniciaste en el nudismo?

La primera vez fue allá por 1988, el verano de mis 18. Tres amigos del instituto hablaban de conocer una playa nudista en un sitio al parecer magnífico donde hasta se podía pernoctar con tu tienda de campaña, así que después de años paseando desnudo por mi casa cuando me encontraba a solas o buscando lugares solitarios por los montes, donde poder pasear y montar en bici o simplemente pegar cuatro gritos de desahogo o sentarme a contemplar el paisaje, todo sin ropa, hacerlo por fin acompañado me atraía muchísimo.

Así conocí la playa nudista de Cantarriján. Pasamos un fin de semana magnífico donde he de reconocer que la curiosidad por ver cuerpos desnudos de todo tipo se sació en unas pocas horas y llegados a ese punto, pasé de ser un tímido observador a un nudista entusiasta. De los cuatro que fuimos, sólo dos nos desnudamos y los que más disfrutamos, por supuesto.


_ ¿Qué te aporta?

Insisto en que haces nudismo cuando estás en algún lugar con otras personas que también disfrutan el hecho de estar desnudas. Partiendo de esa base, moverme en ambientes donde la gente lo comparta,  me relaja y hace sentir bien. Me considero un nudista empedernido, así que procuro llevarlo hasta la máxima expresión. Afortunadamente nací y vivo en una ciudad que goza de buenas temperaturas entre ocho y diez meses al año, así que realmente para mí la desnudez forma parte de mi vida hasta el   punto que me molesta vestirme ¿Cómo puedo explicar esto a alguien que no lo siente como yo?


_ ¿Dónde has conocido a tus amigos nudistas?

En 2010 me atreví a participar en un encuentro nudista promovido por AANUMA (Asociación de Amigos del Nudismo en Madrid), me desplacé en tren desde Málaga con mi tienda de campaña y mi saco de dormir, para disfrutar un fin de semana de convivencia donde se reunieron los socios en la parcela de un albergue junto al río Jarama en Uceda (Guadalajara), cada uno durmió en su elemento de acampada o en el propio albergue.

Uceda, Guadalajara (2011) - © ajspimentel

No pudo ser más entrañable, así que repetí al año siguiente, esa vez dispuesto a darlo todo en las actividades propuestas: concurso de disfraces, tiro con arco, baños en el río, excursiones nudistas… Alguien de esa asociación me habló de un foro en Internet donde había muy buen ambiente, probé primero a leer sin participar, pero enseguida pude ver que era un sitio sano, sin desvirtuaciones, así que me presenté y fue el comienzo de una buena etapa en cuanto a relaciones interpersonales. El foro se llamaba Ser Nudista y por medio de las presentaciones, los juegos, los hilos de noticias y otros muchos muy variados e interesantes temas, se conseguía que los participantes nos fuéramos desnudando ante los demás (en sentido figurado). De las pantallas a las primeras reuniones en pequeños grupos por tu zona y luego a las reuniones a nivel nacional, cuando te veías con los demás en vivo, tenías la sensación de que ya los conocías de toda la vida.

Hoy no sólo sigo en contacto con muchos de los que conocí en ese foro, sino que forman parte de mi día a día siendo de mis mejores amigos. Una pena que se fuera apagando con la llegada de las aplicaciones de mensajería directa. WhatsApp vino para quedarse, se fueron formando grupos y subgrupos que llegaron a ser más activos que en el foro. Luego llegó Instagram… También tengo mucha relación con nudistas a través de esa app y no desaprovecho la oportunidad para coincidir con ellos cuando se tercia.


_ ¿Tus amigos textiles, aceptan tu forma de vida o ha habido alguien que se alejó de ti por ello?

No soy consciente de que nadie se haya alejado de mi por el hecho de ser nudista. Por regla general,  tus amigos te quieren como eres, ¿qué clase de amigos serían entonces?


_ Algunas personas te consideran un referente en la visibilidad del nudismo, ¿esto te resulta positivo o a veces puede llegar a ser una carga?

¿En serio, un referente? Creo que me viene grande ese adjetivo, jajaja… Ahora que lo dices, nunca me lo he planteado. Pienso que es positivo siempre que eso ayude a alguien de alguna forma. Igual que a mí el hecho de relacionarme con otros nudistas, hizo que dejara de sentirme como un bicho raro, me encanta cuando descubro que otros se animan a dar el paso cuando siguen mi trabajo ¿No te parece positivo? No, no lo siento como una carga en absoluto.


_ ¿Te preocupa que el hecho de dar visibilidad al nudismo a través de tu experiencia personal pueda implicar consecuencias no deseadas para ti o tu entorno?

Sólo me preocupa que a mi mujer o a mis hijas les pueda perjudicar de alguna manera. Mi familia y mis amigos, mis vecinos y prácticamente todo el que me conoce un poco, ya sabe como soy. No sólo no lo oculto, sino que prefiero dejarlo claro en cuanto tengo la oportunidad.

Mi mujer tiene una parte de su familia que pensamos que no lo admitiría, así que simplemente con ellos no se toca el tema. Mi hija menor está en plena adolescencia y de momento prefiere no contarlo en su entorno. Ambos casos son perfectamente comprensibles y respetables.

No veo qué consecuencias no deseadas podría acarrearme el ejercicio de dar visibilidad al nudismo, pero no es algo que ahora me preocupe. Para mí, vivir una vida lo más plena posible es mucho más importante, no estamos tanto tiempo en este mundo como para sufrir por nimiedades.

Foto Spencer Tunick - © ajspimentel

_ ¿Qué experiencia nudista te ha marcado más y por qué?

Como os comenté antes, en marzo de 2019 participé para uno de los trabajos de Spencer Tunick, en Valencia. Siempre tuve muchísimas ganas de hacerlo y aproveché que venía a España para sumarme a tantos otros atrevidos, locos, divertidos y desinhibidos que no tuvieron ningún reparo en levantarse a las cuatro de la madrugada para pasear desnudos por las calles de la ciudad y posar al amanecer para el fotógrafo neoyorquino.

Hacía bastante frío, unos ocho grados durante toda la sesión y el mármol del suelo que pisábamos descalzos y donde a ratos tocaba tumbarse, estaba realmente congelado para alguien del sur como un servidor, acostumbrado a temperaturas más amables con los cuerpos sin ropa. A pesar de ello lo recuerdo como algo único y que bien valió la pena.


_ Sabemos que tres de tus pasiones son el nudismo, la fotografía y el mundo de la caravana. ¿En qué orden las situarías en tu vida y cómo ha influido cada una de ellas en las otras dos?

¡Guau! Menuda pregunta (risas). Son complementarias y huelga decir que cuando más feliz estoy es cuando coinciden las tres. Si además lo comparto con amigos y familiares, ya es el summum.

El nudismo iría en primer lugar puesto que es lo que más presente está en mi vida. La fotografía es mi pasatiempo favorito, como aficionado en constante aprendizaje, no hay un día en el que no mire cientos de fotos, lea sobre ello, fotografíe cualquier cosa o piense en posibles proyectos fotográficos para llevar a cabo cuando encuentre el momento apropiado. A la par está el mundo de la caravana, otra pasión que me hace evadirme de lo cotidiano. Esta me ofrece a menudo un marco ideal y la cámara es el medio para llegar a la difusión del nudismo.

Yoga - © ajspimentel

_ Participaste en una ciclonudista, ¿cómo fue tu experiencia en ella?

¡Divertida! Aunque algo agridulce también. Por una parte, el placer de pedalear totalmente desnudo por las calles más céntricas de Madrid; por otro, la incomodidad de sentirte expuesto a miles de miradas y cámaras de teléfonos móviles grabando. Tan pronto una parte del público arrancaba a aplaudir al grupo como otra te insultaba de la forma más desagradable posible.

Tengo claro que volveré a participar porque es una posibilidad más de estar desnudo y de todos modos una forma más de revindicar algo (en este caso lo indefenso del cuerpo humano ante el apabullante tráfico rodado de las ciudades), pero sé que volveré a tener esa sensación de ser un mono de feria. 

Ciclonudista Madrid (2919) - © ajspimentel

_ ¿Qué piensas que se podría hacer para que el nudismo estuviera más normalizado y fuera más aceptado?

Habría que empezar por nosotros mismos, por exteriorizarlo sin miedo, por entender que asociarse es beneficioso para todos, que ayuda a tener más fuerza y a que se nos vea más. Hay mucho trabajo dedicado a la promoción del nudismo y la protección de los lugares de tradición nudista detrás de las personas que encabezan las asociaciones. Los que no saben ni que existen, no se imaginan que esos lugares a los que acuden para desnudarse con cierta garantía a nivel de bienestar y tranquilidad, probablemente habrían desaparecido si no estuvieran ellos detrás luchando por que así sea.

Me encantaría poder decir que me siento orgulloso de pertenecer a la FEN (Federación Española de Naturismo), pero afortunadamente soy socio de AAPNC (Asociación Amigos de la Playa Nudista de Cantarriján) y esta no tiene secretos con sus socios, manteniéndonos bien informados de todo lo que acontece en cuanto a las relaciones entre las propias asociaciones y la FEN, así que tengo que reconocer mi decepción cuando descubro que no se trata a todas las asociaciones por igual en cuanto hay alguna discrepancia de criterios. Más aún cuando veo no sólo que se nos retira el apoyo, sino que se nos tiene en el punto de mira recibiendo continuos ataques.

La base del crecimiento es estar todos a una para poder avanzar y que el nudismo se expanda. Si no entendemos esto desde dentro, poco más se va a hacer desde fuera en pro de la normalización y aceptación.


_ ¿Cómo imaginas el nudismo dentro de 10 años?

Los últimos acontecimientos mundiales me han hecho recapacitar mucho sobre mi relación con el tiempo. No soy capaz de ver tan lejos, pero deseo que, si no crece, al menos no retroceda. Me da miedo lo negativamente que las redes sociales influyen en las nuevas generaciones, pero tengo la esperanza de que con el tiempo sean capaces de pensar por ellos mismos. Por otra parte, estoy seguro de que esto es y seguirá siendo algo minoritario y que muchos de nosotros lo llevamos intrínseco en nuestra persona, así que tarde o temprano el deseo de exteriorizarlo se manifiesta y buscamos la forma de hacerlo posible. 


_ Y por último ¿hay algo que quieras añadir, teniendo en cuenta que nuestro blog se dirige a un público nudista?

Que se lancen a hablar de ello de la forma más natural posible con todo el que le rodee, siempre desde el respeto y la tolerancia, dejando fluir. Desde que decidí no ocultarlo como si se tratara de algo inapropiado, me lancé a exteriorizarlo en prácticamente todos los ámbitos de mi vida y empecé a publicar fotos en redes sociales, me siento infinitamente más libre y de eso se trata.

Que se animen a unirse a la asociación naturista que tengan más a mano o a la que les parezca que más le puede aportar. Que acudan a los eventos que se organicen.

Que prueben a caminar desnudos por la montaña, a hacer cosas que no hayan hecho nunca antes desnudos.

En definitiva, que disfruten de la vida sin ropa todo lo que puedan.




Nota. Todas las fotografías de este artículo pertenecen a @ajspimentel y tienen derechos de autor.